Sol
En un cuadro donde el sol apenas brillaba tenía que pararse precisamente donde no se iluminaba su rostro y apenas se dibujaba su silueta. Adivinar figuras a contraluz no es sencillo, sobre todo cuando se encuentra sólo lo que se busca y se desestima lo que está. Sin embargo, ahí en medio de la nada, se adivina un viento, que no despeina porque quiere abrazar, espera la llegada de alguien.
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